La sostenibilidad en la producción de plásticos es un tema crucial en la actualidad, especialmente considerando la dependencia histórica de la industria en los combustibles fósiles. Un artículo reciente de ING Think profundiza en cómo la industria del plástico puede funcionar sin combustibles fósiles y los costos asociados a esta transición. Aquí te compartimos los aspectos más destacados y las implicaciones para el futuro.
Los Costos de Producir Plásticos sin Combustibles Fósiles
La transición hacia plásticos sostenibles implica un aumento significativo en los costos de producción. Los plásticos basados en metanol verde, que se produce utilizando biomasa o hidrógeno verde, son mucho más caros que los plásticos convencionales. Actualmente, el costo de producir estos plásticos puede oscilar entre €2000 y €3000 por tonelada, comparado con los €800 a €1400 por tonelada de los plásticos tradicionales derivados del gas o el petróleo.
Retos Tecnológicos y Económicos
La producción de plásticos sin combustibles fósiles no solo es costosa, sino también técnicamente desafiante. La tecnología necesaria para producir metanol verde y convertirlo en plásticos aún no está tan desarrollada como la tecnología de craqueo de etano y nafta, utilizada para producir plásticos a partir de gas y petróleo.
Impacto en las Emisiones de CO2
Una de las principales ventajas de los plásticos basados en hidrógeno verde o biomasa es su potencial para reducir las emisiones de CO2. Sin embargo, esta reducción de emisiones solo se logra si la electricidad utilizada en el proceso de producción proviene de fuentes renovables. Si la electricidad proviene de plantas de gas o carbón, las emisiones pueden ser incluso mayores que las de los plásticos convencionales .
Captura y Almacenamiento de Carbono (CCS)
La tecnología de Captura y Almacenamiento de Carbono (CCS) ofrece una solución prometedora para reducir las emisiones en la producción de plásticos. Aplicar CCS a las tecnologías actuales podría reducir las emisiones de CO2 en un 50% a 60%. Sin embargo, esta tecnología aún no se ha adoptado ampliamente debido a sus altos costos y a la falta de mandatos regulatorios.
Reciclaje de Plásticos
El reciclaje de plásticos es otra estrategia importante para reducir las emisiones. Sin embargo, el proceso de reciclaje en sí genera emisiones de CO2, y la capacidad del reciclaje para satisfacer la demanda global de plásticos es limitada. Actualmente, solo el 8% del plástico se recicla en Europa, lo que destaca la necesidad de mejorar las tasas de reciclaje y hacer que el proceso sea más eficiente.
Conclusión
La transición hacia una industria del plástico sin combustibles fósiles es un desafío complejo que implica altos costos y retos tecnológicos significativos. Sin embargo, combinando diversas estrategias como la producción de plásticos a partir de biomasa, el uso de hidrógeno verde, y la implementación de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono, es posible avanzar hacia una producción más sostenible y reducir las emisiones de CO2.